Paso 1: Inspección Visual
Se realiza una revisión inicial de la edificación para detectar signos evidentes de daños, asentamientos o deformaciones. Esta etapa permite identificar áreas críticas que requieren un análisis más detallado.
Paso 2: Análisis Estructural
Se lleva a cabo un análisis más profundo, utilizando herramientas y software especializados. Este análisis incluye simulaciones de sismos para evaluar cómo respondería la estructura ante un evento sísmico.
Paso 3: Informe Final
El resultado de la evaluación se presenta en un dictamen estructural formal, donde se indican las conclusiones y recomendaciones. Este documento se convierte en la guía para realizar las adecuaciones necesarias.